Los rodajes están en auge en Barcelona, que acapara tres de cada cuatro tomas de escenas de películas, series y anuncios en Catalunya. La capital acumula grabaciones (7.164 permitidas en 2022, el último año con datos disponibles) y el Ayuntamiento ingresa una recaudación creciente (537.090 euros en 2022, récord hasta la fecha), aunque el tirón resulta en ocasiones una molestia para los vecinos, ya sea por la saturación de filmaciones en torno a la misma zona o por las exigencias con que el guion obligan a ocupar una calle.
Pedralbes ha sido uno de los últimos barrios en sentirse incomodados por un rodaje. Una de sus arterias se transfiguró en un bulevar parisino con la calzada y parte de la acera cubiertas de tierra batida, como una pista de tenis de Roland Garros. La ambientación se debió al ‘spot’ de un coche de Renault que levantó polvo y críticas.
“Hay muchas grabaciones, pero nunca habían sido como esta. Esta vez ha sido insoportable”, protesta el presidente de la Asociación de Vecinos de Pedralbes, Lluís Sanglas. Explica que las escenas se tomaron el domingo 11 de febrero en la parte alta de la avenida de Pedralbes, entre el jardín de la Creu de Pedralbes y la calle Cavallers. La vía cambió de nombre por un día: como parte de la decoración, unos rótulos pasaron a denominar la avenida como rue des Acacias. Se trata de una calle que existe en realidad en París y en la que residió el aviador Roland Garros, quien da nombre al célebre torneo de tenis.
Sanglas atestigua que atendió “muchísimas quejas” de habitantes de la zona durante la jornada dominical en que las escenas se tomaron: “Bloquearon el barrio durante todo el día. La Creu de Pedralbes quedó cerrada y la avenida de Pedralbes, también. Debían acabar a las cuatro de la tarde, pero los vecinos dicen que se alargaron más horas de las previstas. Aparte de cerrar la calle, hubo ruido y polvo. Las terrazas quedaron llenas de tierra batida. Algún vecino me dijo que tuvo que lavar a los perros, porque quedaron llenos de polvo”.
Viento inoportuno
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El Ayuntamiento contesta que la grabación disponía de permiso. Cuenta que el equipo de rodaje empezó a barrer a la hora prevista, pero el viento que sopló aquella tarde no ayudó precisamente y alargó el corte de la calle más de lo previsto.
Los trabajadores dieron aviso de que las rachas levantaban la tierra y la arrastraban, lo que complicó las tareas para que el tramo quedara impoluto. Solicitaron ayuda de la brigada municipal de limpieza. El consistorio afirma que se envió a un equipo, que aún halló rastro del polvo en la avenida a la mañana siguiente. Se pasará factura por los servicios extraordinarios a los responsables de la filmación. El Ayuntamiento agrega que recibió un par de quejas durante la jornada. En todo caso, añade que se cumplió con la licencia.
Sanglas expuso el malestar la semana pasada en el consejo de barrio de Pedralbes. “Los carteles del Ayuntamiento para anunciar filmaciones son moneda de cambio en el barrio, pero esta vez se debería haber informado por carta que iba a ser distinto -esgrime-. Un anuncio significa tráileres y carpas que bloquean calles. Nos llamó un vecino tras otro porque no podían salir, tenían la calle bloqueada”.
El dirigente vecinal opina que “no estaría de más una disculpa”. Valora que, al menos, unos chicos equipados con monos blancos barrieran para retirar la tierra batida. “Limpiaron bien, también las jardineras, que quedaron llenas de arena rojiza. No sé cuánta agua gastarían, estuvieron todo el día”, comenta.