La crisis del Mar Rojo trae al Puerto de Las Palmas al mayor portacontenedores del mundo. El MSC China, con una capacidad máxima de 24.116 contenedores (teus), atracó este martes junto al recinto capitalino con el propósito de repostar antes de afrontar el rodeo del continente africano para regresar a Asia en lugar de atravesar el Mediterráneo y el Canal de Suéz para evitar posibles asaltos por parte de los hutíes, un grupo armado que opera en Yemen y que lleva varias semanas amenazando al tráfico marítimo internacional solicitando un alto al fuego en Gaza por parte de Israel.
La llegada de este megabuque al Puerto de Las Palmas se produce menos de una semana después de que las mayores navieras del mundo -MSC y Maersk, entre otras- decidieran desviar sus rutas y evitar el mar Rojo. El MSC China, -flotado en el puerto chino de Shanghai el pasado mes de octubre- es el primero que recala en Las Palmas de Gran Canaria en esta crisis, aunque la Autoridad Portuaria vaticina que serán más los que pasen por el recinto capitalino en las próximas semanas ante la escalada de ataques a las embarcaciones en Oriente Medio.
La naviera ya tiene prevista la llegada a La Luz de más buques desviados del Canal de Suez
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En la tarde de este martes estaba previsto que el buque recalara en el muelle Cristóbal Colón, en la terminal de contenedores de Opcsa, cuya participación mayoritaria corresponde a la naviera Mediterranean Shipping Company (MSC). Antes de su llegada a la capital grancanaria, la embarcación ha pasado estas últimas dos semanas por los recintos de Amberes (Bélgica), Rotterdam (Países Bajos), Le Havre (Francia) y Tánger Med (Marruecos). En este último es donde el carguero tendría que haber tomado rumbo a Asia por el mar Mediterráneo.
En su lugar, el buque se está preparando para circunnavegar el continente africano a través del Cabo de Buena Esperanza. Se trata de una ruta mucho más larga que encarece el transporte de mercancías. De Tánger al océano Índico a la altura de las islas Maldivas -al sur de la India- hay una distancia de unos 10.000 kilómetros; en cambio, la ruta habitual alrededor de África -con escala en Canarias en esta ocasión- ronda los 17.000 kilómetros.
Bandera de Liberia
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Fuentes cercanas a Opcsa señalan que la llegada de este megabuque -el mayor que pasado por el Puerto de Las Palmas en sus más de 140 años de historia- no será un hecho aislado. La naviera ya tiene previsto para los próximos días la llegada de otros barcos -menores eso sí- que tendrían que haber cruzado el Canal de Suez en una u otra dirección y en su lugar darán la vuelta por Buena Esperanza. Estas circunstancias se dan en plena campaña de Navidad.
El buque, botado en octubre en Shanghai, puede transportar una carga de 240.000 toneladas
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El MSC China, que navega con bandera de Liberia, forma parte de una serie de cuatro megabuques de MSC con similares dimensiones y capacidad para más de 24.000 contenedores. El primero, el MSC Tessa, fue botado el pasado mes de marzo. El récord anterior lo ostentaba el Ever Alot, de la compañía Evergreen y la posibilidad de albergar 24.004 teus. Con sus 399,99 metros de eslora, 61,5 metros de ancho y otros de 33,2 de calado, ha marcado récords. El número de contenedores apilados en torres en su cubierta puede alcanzar una altura equivalente a un edificio de 22 pisos.
La embarcación ha sido desarrollada por Hudong Zhonghua Shipyard (HZS), el mayor constructor naviero de China. Está equipado con una torre de desulfuración híbrida y cuenta al igual que sus gemelos con un sistema de reducción de arrastre de burbujas y un sistema generador de eje. Esta tecnología permite al buque transportar una mayor cantidad de mercancías al mismo tiempo que consume menos combustible, de tal manera que puede reducir en unas 6.000 toneladas al año sus emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera.
Y es que el buque puede llegar a transportar una carga de 240.000 toneladas. Esto equivale al 12% de las mercancías totales que se movieron en el Puerto de Las Palmas el pasado mes de septiembre. Precisamente, la llegada de este megabuque para repostar combustible coincide con un año en el que el sector del búnkering no pasa por su mejor momento en La Luz; en los primeros nueve meses del año perdió un 13,1%.