Los Comuns están dispuestos a tumbar los presupuestos. A las puertas de la votación definitiva, no hay acuerdo con el Govern para frenar el Hard Rock y el no del grupo de Jéssica Albiach puede dejar sin aire a la legislatura de Pere Aragonès. La dirigente ha entonado un discurso con la intención de hacer morder el polvo a los republicanos, una beligerancia que evidencia hasta qué punto se han agriado las relaciones del Executiu y los Comuns. De hecho, Albiach ha buscado el choque directo con el president cuando le ha espetado que “se ha doblegado al interés del PSC, a los intereses especulativos de los ‘lobbies’ del juego y de La Caixa”.
Un cuerpo a cuerpo que, por ahora, no se ha escenificado públicamente porque Aragonès no ha intervenido en el debate que está en marcha en el Parlament. Aunque ha mantenido que su mano está tendida hasta el minuto antes de la votación, Albiach ha vuelto a insistir en que para retirar la enmienda a la totalidad y salvar las cuentas, el president debe “rectificar” y comprometerse públicamente a hacer caer de la agenda un plan urbanístico que implica instalar en Catalunya “el mayor casino de Europa”.
A degüello contra el macrocomplejo
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Albiach ha ido a degüello contra el macrocomplejo de Vila-Seca y Salou, del que ha recordado que implica la instalación de 1.200 máquinas tragaperras, el fomento de la “ludopatía, la precariedad y la delincuencia”, la participación de una empresa que “aparece en los papeles de Panamá” y el uso de un terreno que La Caixa “expropió por 130 millones a agricultores a los que pagó tres euros por metro cuadrado”.
También ha hecho hincapié en el alto consumo de agua de la instalación, equivalente a un municipio de 30.000 habitantes, y en una normativa con beneficios fiscales que situarían a Catalunya “al mismo nivel” que Macao o Singapur. “Una auténtica vergüenza de proyecto”, ha espetado la presidenta de En Comú Podem, que también ha dejado caer que defenderlo supone “asumir como propio” un proyecto de derechas que aprobaron CiU, PSC y Comuns hace una década.
“Papel mojado”
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“¿Cuál es el interés público de este macrocasino?”, ha inquirido mirando a la bancada del Govern, al que ha advertido de que llegará un momento en el que habrá que decidir si el agua se destina a agricultores e industria o a los casinos. Albiach también ha hecho público el por qué han rechazado las dos últimas ofertas que le ha puesto encima de la mesa el Executiu. En la primera, ha dicho, solo se “comprometían a estudiar” el freno a los proyectos de alto consumo de agua, que se aprobó como moción en el Parlament, sin que afectara al Hard Rock. En la segunda, un proyecto de ley que tampoco tiene una repercusión en las tragaperras y una proposición de ley para revisar la fiscalidad que tenía el aval de ERC y de los Comuns pero no del PSC. “Es papel mojado”, ha resumido Albiach.
Los Comuns han buscado también lanzar un mensaje de tranquilidad a los colectivos que han pactado mejoras con el Govern en los presupuestos en el caso de que sean tumbados: han dejado claro que apoyarán los decretos y las modificaciones de crédito que hagan posible esas mejoras. “Siempre estaremos al lado de la gente”, ha presumido la presidenta de En Comú Podem, que también ha echado en cara a ERC que pensara que podía apretar la ‘tecla’ de Yolanda Díaz para cambiar su voto. “Madrid no me llama para decir qué puedo votar en el Parlament”, ha concluído.