El Mobile World Congress (MWC) está de vuelta. Este lunes, el recinto Gran Via de Fira de Barcelona abre sus puertas para acoger uno de los eventos tecnológicos más importantes del mundo. De hoy al jueves, la capital catalana volverá a ser el epicentro de una industria digital que no para de expandirse a un ritmo frenético.
Según la consultora Accenture, esta edición volverá a estar marcada por el auge de la inteligencia artificial (IA), campo de moda en el sector desde la irrupción de ChatGPT. Así pues, el MWC contará con la participación de directivos de las grandes empresas que buscan capitalizar esa tecnología, como Microsoft, Google DeepMind, Meta, Nvidia, Qualcomm o Arm.
Sin embargo, hay vida más allá de la IA. Las 2.400 empresas que se reunirán en los salones del recinto ferial ubicado en L’Hospitalet de Llobregat también expondrán, como no puede ser de otra manera, las últimas novedades en telefonía móvil, conectividad 5G y 6G, robótica, microchips, realidad virtual y realidad aumentada, computación en la nube y el futuro de las telecomunicaciones.
Esta semana, el MWC también celebra su mayoría de edad en Barcelona. El congreso aterrizó en la ciudad condal en 2006 focalizado en la industria móvil. Ahora, hasta un 53% de los asistentes a la feria proviene de otros ámbitos como las finanzas, la salud, el deporte o la automoción, un cambio que muestra cómo la transformación digital ha conquistado todo tipo de sectores productivos.
Más asistencia
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GSMA, patronal de la industria móvil y responsable de la feria, es optimista. Su director general, Mats Granryd, aseguró hace unas semanas que la edición que arranca este lunes aspira a alcanzar los 96.000 visitantes. Aunque el récord de 2019 —109.000 asistentes— aún queda lejos, la cifra augurada por la organización sería la mejor desde la pandemia del covid, que obligó a cancelar el certamen.
Parte de ese optimismo se debe al regreso presencial de grandes compañías chinas de telefonía como Xiaomi, Honor, OPPO o Huawei, que volverá a ser la que más espacio de exposición ocupará. La corporación China Telecom participará por primera vez en el MWC. “China es un destino absolutamente crítico para buscar alianzas internacionales”, asegura Francesc Fajula, director ejecutivo de Mobile World Capital Barcelona, la fundación público-privada que trabaja para impulsar el ecosistema empresarial en la localidad.
Consciente de esas previsiones al alza, el aeropuerto Josep Tarradellas Barcelona-El Prat ha incrementado notablemente su actividad. Desde el pasado viernes, el número de vuelos comerciales programados llega a los 8.470, lo que supone casi un 11% más que el año pasado e incluso un 3% más que en 2019, el mejor año del MWC desde que aterrizó en la ciudad condal.
Impulso a las ‘startups’
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Entre las novedades de este año destaca también el peso que gana el 4YFN (4 Years From Now), el pabellón dedicado a las ‘startups’ y a los emprendedores. Este evento, que empezó a rodar asociado al MWC pero en un recinto distinto y que desde la pandemia se encuentra dentro de sus inmediaciones, celebra su décimo aniversario. Y lo hace duplicando la superficie con la que contó el año pasado. Serán dos pisos en vez de uno y 900 empresas expositoras, unas 150 más que en 2019, cuando se alcanzó la que hasta ahora había sido la cifra récord.
Los organizadores del evento calculan que habrá más de 9.000 emprendedores y casi 5.500 inversores que representan a fondos con 50.000 millones de euros disponibles para inyectar en ‘startups’. “No solo será especial, será mejor y más grande que nunca: esperamos dar la bienvenida a más ‘startups’ que nunca y estaremos en dos pabellones, así que expandimos nuestra huella en el MWC”, aseguraba el director del 4YFN, Pere Durán, en una especie de presentación llevada a cabo hace semanas para calentar motores. “Miraremos hacia lo que ha pasado en estos 10 años de ‘startups’ (hemos visto un crecimiento increíble, una explosión de unicornios…), hablaremos de nuestros aprendizajes y miraremos hacia el futuro, hacia las oportunidades que vemos al futuro de la tecnología y de las ‘startups’”, sintetizó.
La idea de fondo de este encuentro es evidenciar cómo será el mundo en cuatro años, a través de los productos y servicios que diseñan y desarrollan este tipo de empresas. El vistazo rápido que permite lo que han ido publicando las organizaciones participantes, promete mucha IA, soluciones de carga para el vehículo eléctrico y para fomentar las energías limpias, una amplia variedad de herramientas para que las empresas agilicen casi cualquier tipo de proceso, plataformas para gestionar grandes volúmenes de datos de forma más visual y muchas, muchas, muchas propuestas para incorporar la tecnología a la medicina.