Dentro de dos meses y siete días, Joan Laporta, cumplirá su tercer año como presidente del FC Barcelona. Fue el 7 de marzo del 2021 cuando se celebraron las elecciones tras una precipitada salida del presidente Josep Maria Bartomeu. Entonces, gracias al voto de 30.184 socios, logró una holgada y democrática victoria frente a los 16.679 culés que se decantaron por Víctor Font.
Laporta no ha cumplido con todas sus promesas electorales, pero, con interrupciones, ha devuelto la ilusión a parte del barcelonismo. Quizá sean los suyos, pero siguen siendo muchos. Solo hay que ver el fenómeno que se ha creado en torno a Vitor Roque. Un futbolista que está por hacer, de tan solo dieciocho años y que ha generado una ilusión fuera de lo común.
Lograr una Liga en su segundo año de mandato y tras tres años de sequía es uno de sus principales logros. Es verdad que en Europa el Barça ha ofrecido una pobre imagen, pero no es fácil construir un equipo nuevo y competitivo con un club con una situación económica dramática.
Confesión a SPORT
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Fiel a la tradición navideña, el presidente del Barça ha confesado a SPORT sus tres deseos para el próximo año. Uno deportivo, uno social y otro económico. Tres deseos que si se cumplen asegurarán que el presidente acabe su mandato. Es más, si los logra, volverá a presentarse. Laporta se ve presidente durante muchos años. Dedica su vida al club y disfruta del cargo como un niño con zapatos nuevos. A todo eso, no tiene oposición externa y dentro del club no hay quien le tosa.
Además, vive en la comodidad de tener un entorno que le protege y los movimientos preelectorales están muy verdes. Víctor Font ha dejado la puerta abierta para volver a presentarse, pero su protagonismo está muy descafeinado. Por su parte, la posible constitución de una candidatura, publicada por SPORT, que encabezaría Joan Camprubí Montal, nieto del ex presidente Agustí Montal, sigue trabajando en silencio, pero también está muy lejos aún de convertirse en un proyecto sólido que pueda inquietar al presidente. El resto de socios que levanta la voz de vez en cuando, como Jaume Llopis, parecen buscar más protagonismo propio que otra cosa. La prueba es que cuando se encuentran cara a cara con Laporta, acaban abrazados…
Por tanto, si Laporta consigue ver cumplidos sus tres deseos, habrá Laporta para años.
1- Aniversario en el Spotify Camp Nou
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El primero es que el 29 de noviembre el Barça juegue su primer partido en el Spotify Camp Nou. O sea, que Limak cumpla con los plazos anunciados y el terreno de juego y parte del Camp Nou esté habilitado para jugar y para acceder el público.
2- Títulos
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El segundo es que se sigan ganando títulos. No será fácil, pero queda mucha Liga y tres títulos más en juego. Ganar dos Ligas consecutivas sería su principal objetivo, pero Laporta no descarta nada.
3- Cumplir el presupuesto
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Finalmente, su tercer objetivo parece el más complicado. Se trata de cumplir el presupuesto de la temporada. O sea, ingresar 859 millones de euros y dar un beneficio de 11 millones de euros. Todo eso, sin vender más palancas y manteniendo un equipo competitivo. No será fácil y son muchos los que cuestionan las cuentas del club, pero con Laporta nada parece imposible.
Así que el máximo dirigente barcelonista seguirá priorizando al primer equipo, aunque eso le obligue a tomar determinaciones impopulares. Quizá veremos la venta de alguna estrella, restricciones en el equipo femenino o más recortes en la sección de baloncesto. Nada le espanta tras despedir al argentino Leo Messi.
En fin, que a Laporta no le tiembla el pulso y planta cara a la escasa crítica. Se cree el salvador del Barça y hará lo que considere oportuno para que se cumplan sus deseos. Veremos que le depara el 2024. Eso sí, reitero, si Laporta logra que el equipo vuelva este año al estadio, si además gana títulos y encima cumple el presupuesto será el rey del mambo.