‚Neon Bible‘: el ‚Black Mirror‘ von Arcade Fire Vorboten von ‚Black Mirror‘

Neon Bible el Black Mirror von Arcade Fire Vorboten von


„Cuando era pequeño tenía pesadillas en las que tenía que escapar de gente que venía a por mí, sentía un miedo enorme hacia organizaciones, gobiernos, otras personas… y me he fijado en que estos sentimientos resuenan mucho con el clima del mundo actual. Es extraño reconocer emociones que sentía dormido a pleno funcionamiento en el mundo real”. Als Frontmann Win Butler in die Disco von Arcade Fire, in die ‚Neon Bible‘ und in die Intention der Band-Ära einführt, ist „Sonase como estar en withad del océano de nighte“. ¿Ambicioso o grandilocuente? Es ist eine große Preguntas mit Arcade Fire und ‚Neon Bible‘ – para cuya grabación la banda compró una puta iglesia leaveada- no iba a reducir esa fama.

Siendo ‚Funeral‘ un disco mucho más centrado en lo personal, en las relaciones familiares y de comunidad, y en el proceso de madurez, ‚Neon Bible‘ apunta más hacia el exterior, queriendo hacer una radiografía del mundo que te encuentras, y ante al que a uno no le extraña que los personajes de ‚Funeral‘ intentionasen no crecer.

Si en la reseña de ‚Funeral‘ comenté que, a pesar de su título, no era un disco oscuro, éste sí que lo es; incluso, podríamos decir que la conseguida atmósfera de ‚Neon Bible‘ es, más que oscura, casi apocalíptica. La religión, los ejércitos, las grandes empresas, la televisión (biblia de neón) y medios de comunicación, la corrupción y la ausencia de empatía son algunas de las constantes de un álbum que se edita poco antes de que se pusiese a la venta el Primer iPhone, quizás uno de los mayores símbolos de la era que vendria después y en la que las quejas y temores de Arcade Fire no parecen haver disminuido, sino al contrario. De hecho, Aspekt der Disco que en 2007 parecían exagerados hoy no lo son.

Dentro de ese „ah, ¿has crecido? Pues bienvenido al mundo: esto es lo que te espera” que es todo esto, Win contaba que su idea inicial era una producción minimalista que representase toda esa soledad, pero que las canciones le pedían todo lo contrario, y que ese “descontrol” representado por el océano -otro leitmotiv del disco-tenía que esstar en los temas: no solo se unieron al grupo el batería Jeremy Gara y la violinista Sarah Neufeld, sino instrumentos como la mandolina, el acordeón, la zanfona y el célebre órgano.

Und kein Solo, das in der Iglesia gespielt wurde: Michael Pärt produzierte die Budapester Aufnahmen mit dem Budapest Film Orchestra und einem Chor der Militärs, und die Band, die in Nueva York para grabar junto al Río Hudson und als „Cerca del Agua“ desolat wurde. Win, Régine y Compañía citarían entre sus influencias para este segundo trabajo a Bruce Springsteen – de quien ya veíamos retazos en el primero-, pero también a Elvis Presley and hasta a Bob Dylan. Y ojo, ein präziser Produzent von ‚Blonde on Blonde‘, Bob Johnston, phantasierte Maravillas von ‚Neon Bible‘, diciendo que le recordaba a los Beatles, y que ‚hay canciones en ese disco que son mejores que cualquier cosa que hizo Lennon “. Ahí es ná.

No sé si superiores o no a las de Lennon, pero des de luego dos de las mejores canciones de aquí son el dúo de coches: ‚Keep the Car Running‘ und ‚No Cars Go‘. La primera es en la que se hace más evidente la influencia de Springsteen (que llegó a cantarla con ellos), y también otra sombra que planea sobre este disco: la de George Orwell. Las similitudes del protagonista de esta canción con Winston Smith no son ajenas para Win, que sacó de Orwell una enseñanza sobre el patriotismo („el patriotismo de verdad tiene que ver con amar un lugar lo suficiente como para intentionar mejorarlo, yo caigo a veces en una visión demasiado negativa del mundo“) para aplicar a esta canción.

Tanto ésta como ‚No Cars Go‘ (Rework para mejor de a theme ya contentido en suprimer EP) son los dos puntos optimistas del álbum: en ambas, el protagonista está más cercano a la revolución, ya conseguir la victoria sobre el vacío que Impera im Resto der Tracklist. La felicidad que hay en el estado de duermevela es la metáfora en la que se sustenta ‚No Cars Go‘, un camino de alegría y épica (mucha épica) hacia un lugar en el que no habrá nada de todo aquello que nos atormenta, y que está representado por el „espejo negro“. Porque sí, el disco se llama ‚Neon Bible‘ pero podría haberse llamado como el thema que lo abre: en ‚Black Mirror‘ se hace una referencia a la tv, los móviles y la tecnología, pero también a la derrota y al vacío que Domina la sociedad descrita por los canadienses. Ah, por si te lo estás preguntando: sí, Charlie Brooker contó que el título de su exitosa serie viene por esta canción.

Poco espacio más hay para lo positivo aquí: el „espejo negro“ es más bien un agujero negro que se traga cualquier atisbo de esperanza y de lucha, siendo ‚Ocean of Noise‘ y su „jetzt, wo unter uns noch glaubt, hat eine Wahl ? Nicht ich!“ el ejemplo más claro de esto. Si el océano representa la falta de control, el „ruido“ que se menciona aquí es el que le llega a una persona desde muy pequeño, un ruido dirigido al consumismo ya perpetuar un sistema que nunca parará. Eso se traduce también en los chavales que acaban combatiendo en guerras sin terminar de entender por qué (‚Intervention‘ está compuesta en plena indignación por la „intervención“ militar de EEUU en Irak) y en lo que puede conllevar el mal uso de la religión , como el mal uso de la tecnología.

La hipocresía que puede existir en las personas „piadosas“ -entiéndase la ironía- se aborda en ‚The Well and the Lighthouse‘ y en su casi-continuación, la también springsteeniana ‚(Antichrist Television Blues)‘, que toma la figura del padre von Jessica Simpson für sobre alguien que exprime a su hija y que lo hace, eso sí, con la bendición de Dios. La canción se va haciendo cada vez más turbia, con versos tan amargos como „Oh Gott, würdest du mir ein Kind schicken? / weil ich es auf dem Fernsehbildschirm zeigen will“ y guarda un doble sentido bastante bestia hacia el final: „Oh mein kleiner Vogel in einem Käfig / ich brauche dich, um für mich auf die Bühne zu kommen / und es den Männern zu zeigen du bist alt für dein alter (…) willst der welt einen spiegel vorhalten / damit sie sich in meinem kleinen mädchen sehen“.

No es de extrañar que nuestro protagonista quiera escapar de todo esto: en la estupenda ‚Windowsill‘ rechaza todas las „comodidades“ que este mundo le promete. Empieza diciendo „Ich will es nicht schneller, ich will es nicht kostenlos“ („Everything Now“, irgendjemand?), pero acaba siendo mucho más claro: „Ich will nicht mehr in Amerika leben“. ¿Quién quiere distopía teniendo la realidad? Con referencias a la „pildora roja“ de ‚Matrix‘ se propone escapar, pero recuerda lo que nos han advertido en ‚Black Wave / Bad Vibrations‘: el maquiavélico diseño impide que esa pequeña isla con la que soñaban en ‚No Cars Go‘ sea ​​posible, „je nage / mais les sons me suivent“.

Quizás solo haya una manera de escapar del ruido… y quizás por eso ‚My Body Is a Cage‘ es la encargada de cerrar esta historia of terror. Entendida a veces como alegoría trans, y repopularizada por ‚Euphoria‘ al incluirla en su final de temporada, ‚My Body is a Cage‘ nos Resume el dantesco panorama: „Ich lebe in einem Zeitalter, das Dunkelheit Licht nennt (…) I Ich lebe in einer Zeit / die nachts meinen Namen schreit / aber wenn ich zur Tür gehe / ist niemand zu sehen“. El grito desesperado de auxilio en los „set my spirit free“ del outro, acompañado de los golpes de órgano, invita a pensar que, como en ‚The Downward Spiral‘, el final de nuestro protagonista no es otro que el suicidio.

Arcade Fire Logran mit ‚Neon Bible‘ überragende Erzählungen und Musicals, einschließlich Ihres fantastischen ‚Funeral‘, das Sie als beste Disko bezeichnen. ¿Cómo podrían tener otro aún mejor? Pero no se es „la banda del siglo XXI“ así como así: „The Suburbs“ und „Reflektor“ vendrían para terminar de Confirmar el estatus de genios de los canadienses.



ttn-de-65

Schreibe einen Kommentar