Munir El Haddadi debutó oficialmente con el primer equipo del Barça hace poco más de 10 años. Luis Enrique le dio la alternativa con 18 añitos un 24 de agosto del 2014 contra el Elche. Munir debutó a lo grande marcando un gol.
Las enormes expectativas generadas a su alrededor no se han cumplido aunque el jugador nacido en El Escorial ha sumado una década en la élite.
Su currículum ha ido de más a menos pasando de clubs como el Barça, Valencia o Sevilla a equipos como el Alavés, Las Palmas o Leganés.
Este domingo (21h) se verá las caras con Lamine Yamal en Montjuïc. Munir apuntó a ser algo parecido a lo que Lamine está logrando exhibir con regularidad en el club blaugrana.
Munir El Haddadi y Lamine Yamal comparten aspectos coincidentes. Ambos han nacido en territorio español con familia de origen marroquí.
Los dos son delanteros zurdos híbridos que se mueven con habilidad entre líneas arrancando desde la derecha.
Más coincidencias de lo que podría parecer
Munir y Lamine se formaron en La Masia y fueron una apuesta personal de un entrenador del Barça con pasado glorioso como jugador. Y ambos fueron objeto de una ‘guerra fría’ entre las federaciones española y marroquí para asegurarse su presencia internacional.
Cuando Munir debutó con el primer equipo blaugrana Lamine arrancaba su etapa en la cantera del Barça jugando en el prebenjamín.
Hay 12 años de diferencia de edad entre ambos. Mientras Lamine es una estrella con 17 años, Munir dejó hace tiempo la consideración de eterna promesa para consolidarse como un buen jugador de equipo en la primera división.
Cuando Munir saltó al primer equipo se levantaron muchas esperanzas pero su convivencia con el tridente Messi-Suárez-Neymar no fue sencillo.
La sanción inicial que sufría el delantero uruguayo a causa de su acción a Chielini en el Mundial del 2014 dejó vía libre para Munir en el inicio de curso.
Luis Enrique apostó por su presencia y la del canario Sandro pero cuando Suárez pudo debutar los minutos escasearon y Munir rindió solo a ráfagas.
Captados de un club modesto
La historia de Munir en el Barça había empezado unos años antes cuando Albert Puig se anticipó al Atlético Madrid y lo fichó del cadete del Rayo Majadahonda. Curiosamente, Munir llegó con 15 años al Barça, la edad en la que Lamine debutaría posteriormente gracias a la visión de Xavi Hernández.
Munir jugó dos temporadas en el Juvenil B del Barça, un equipo en el que curiosamente Lamine no llegó ni a debutar saltando del Cadete A al Juvenil A.
Munir marcó un golazo en la final de la Youth League del 2013 que le consagró como una gran promesa de la Masia.
El paso de Lamine por la Youth fue en cambio más discreto ya que en esa época era la alternativa a Ilias Akhomach, otro hispano-marroquí made in La Masia. Si Lamine llegó a jugar solo tres partidos con el Barça Atlètic, Munir sumó 28 partidos con el filial blaugrana.
El paso por la selección española
Un aspecto muy parecido en sus trayectorias es el debut precoz con la selección española. Cuando Vicente Del Bosque convocó a Munir con España, el delantero de origen marroquí solo había sumado dos partidos con el primer equipo blaugrana, Lamine necesitó apenas cinco.
Ambos habían jugado en las selecciones inferiores de España pero mientras que Munir debutó y no volvió a jugar más con la Roja contra Macedonia, el partido contra Georgia disputado el mismo día (8 septiembre) pero nueve años después fue solo el inicio de una trayectoria brillante coronada con una Eurocopa lograda siendo pieza clave.
Trayectorias dispares
Lamine llegó al Barça de un club modesto (La Torreta) como lo hizo Munir procedente del Rayo Majadahonda. Los padres de ambos fueron inmigrantes marroquís que se instalaron en Madrid y Catalunya y ambos deslumbraron en la cantera del Barça gracias a una zurda de mucho nivel.
En el fútbol formativo ambos alternaron las posiciones de ‘7’ y de ‘9’ y destacaban por su gran talento y proyección. Ahora Munir vive a la sombra de los grandes cracks de la liga en un modesto como el Leganés y sueña con volver a ser internacional marroquí.
Lamine, por su parte, es ya un jugador consolidado con 17 años y apunta a crack histórico del Barça.
En la actual temporada Munir ha jugado 12 partidos ( 6 de titular) y ha marcado tres goles con el Leganés de Borja Jiménez mientras que Lamine suma 19 partidos oficiales (17 de titular) y seis goles en el conjunto de Hansi Flick.
Un duelo desequilibrado
Munir apuntó a ser lo que es ahora Lamine. Ambos se verán las caras en el Lluís Companys con objetivos dispares. Mientras Munir lucha por ayudar al Leganés a salvarse, Lamine es el futbolista más desequilibrante del gran proyecto de Hansi Flick. Las diferencias actuales saltan a la vista pero el fútbol es tan caprichoso que nadie puede asegurar que, por un día, Munir le robe protagonismo a Lamine y demuestre que no estuvo tan lejos de poder ser una estrella.
Lamine, por su parte, intentará seguir creciendo y ganándose la fama de mejor talento joven del planeta y un firme aspirante al próximo balón de oro. Lamine aterrizó en un Barça en el que la delantera titular era Dembelé-Lewandowski más Gavi de falso extremo, mientras que Munir tuvo que competir con uno de los grandes tridentes de la historia del fútbol.
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Munir sumó 12 goles y 11 asistencias en 56 partidos con el primer equipo mientras que Lamine acumula de momento 71 partidos con el primer equipo aportando hasta el momento 13 goles y 21 asistencias. ¿Cómo le hubiera ido a Munir si llega a debutar una década después en el Barça actual? ¿Y que hubiera sido de Lamine si hubiera tenido que competir con Messi-Suárez y Neymar? Hay preguntas que nunca tendrán respuesta.