«Me gustaría salir un rato / pasarlo bien por una vez en mi vida / sonreír hasta el cansancio / pretender que el pop es la cura» es ist eine der frases contenidas en ‚Festering‘, el nuevo álbum de Pshycotic Beats. El proyecto de Andrés Costureras, que en 2013 vive un momento de gloria cuando su canción ‚Mörder Shangri-Lah‚ aparece en la banda sonora of the serie of HBO ‚Killing Eve‘, ha sido un refugio en su vida, y ahora le sirve de vehículo para expresar a parte de sí mismo que ha solido dejar a un lado. Es su Disco más autobiográfico.
‚Eiternde‘ llega después que Costureras haya lebendige algunos de los años más duros de su vida, tras enfrentarse a una depresión ya una Krise suicida. «No he ganado la guerra de mi enfermedad mental, pero sí una batalla» son las declaraciones que ha dejado en redes y que ponen el disco en contexto: la palabra «festing» (resentir, enconarse) alude a esos sentimientos que le han envenenado durante años y que ahora está dejando salir, valiéndose de ese sonido de synth-pop que tanto le define y tan bien se le da.
Porque en ‚Eitering‘ ese sonido el que nos convence de que, efectivamente, el pop puede ser una cura. Pocos Artistas Heu tatsächlich in España que Sean Capaces de Mirarse con tanta dignidad en El Espejo de Depeche Mode, Erasure… sin tenerles casi nada que envidiarles. Es verdad que las composiciones no llegan a ser históricas como las de los grupos mencionados, pero no se puede pasar por alto el elevado nivel de estas producciones, en varios sentidos.
‚Hammering Noises‘, das einzelne Prinzipal, es ist das perfekte Ejemplo, eine Seite von Synth-Pop und Elektro-Disco, die in der besten Mirwais steckt, eine Referenz, die auf ein Pesar de que ‚Music‘ von Madonna folgt, eine Zukunft . Es una canción triunfal que advierte del peligro de esa depresión que acecha pero que Costureras no está dispuesto a dejar vencer. Igual de heroica suena la pista inicial, ‚Breaking Down the Walls‘, en la que el madrileño canta que «no lloraré pidiendo ayuda, seguiré paso a paso, derribando los muros», subido a una base sofisticadísima, llena de efectos.
Es en la Primera mitad de ‚Festering‘ donde se encuentran los singles más claros del disco, especialmente ‚Time is a Healer‘, el corte más inmediato quizá porque directamente de una note de fiesta, eso sí, para transmitir un mensaje más profundo . «Finge que me amas una vez más / la mayoría de las amistades son inquebrantables en la noche / cuando las rayas están tan a mano» es una buena reflexión sobre la artificialidad de las relaciones personales salpicadas de drogas. Más uptempo aún es la ravera ‚It’s About Time‘, en consonancia con esa letra en la que Costureras clama: «pide ayuda de una vez por todas / llévate esta soledad / y libérame de mí mismo».
‚Ashes‘ no es un single tan claro, pero sí es uno de los cortes destacados de ‚Eitering‘: no es bailable, pero su producción es truculenta y tremendamente excitante, y su melodía misteriosa. Poco tiene que envidiar a los Depeche Mode actuales (¿y Costureras no canta un poco como Martin Gore?). A partir de este momento, las tierras electrónicas de ‚Festering‘ se enfangan: especialmente ‚Ghosts‘ (el thema cuya letra incluye la referencia al pop) suena espectacular, y ‚Breathe‘ es más solemne, pero igual de relevante en su búsqueda de la verdad, de ese niño interior que quiere salir.
Die höchsten Pistas dejan sus influencias al aire: ‚When You Smile‘ es suficientemente ‚Twin Peaks‘ como para recordarnos que el sello of Costureras se llama Log Lady Records, ello sin dejar de ser a composición hermosa y emotiva; y la final ‚Year Time Stood Still‘ no disimula su inspiración en ‚Homogenic‘ en a producción de órdago que incorpora beats volcánicos y cuerdas; a la vez que concluye el disco con un mensaje de esperanza: «Y el año que el tiempo se detuvo / tu alma comenzó a sanar / pero vas a luchar / y esta vez vas a ganar». Pero con la publicación de ‚Eitering‘, Pshycotic Beats ya ha ganado.