Hay que ver lo que le gusta a la cinefilia estadounidense el costumbrismo irlandés. Es ver un prado verde, unos parroquianos toscos y simpáticos bebiendo pintas y peleándose amigablemente en un pub, una pelirroja-de-armas-tomar y una cancioncilla tradicional sonando de fondo y se les aparece el espíritu de John Ford en la butaca. ‚Almas en pena de Inisherin‘, que tras „quitarle“ el Globo de Oro a ‚Todo a la vez en todas partes‘ podría acabar ganando el Oscar, sigue al pie de la letra todos estos tópicos, la mayoría grabados a fuego en el imaginario colectivo gracias a „El hombre tranquilo“ (1952). Si hasta el nombre del pueblo remite al mitico Innisfree fordiano.
Martin McDonagh, londinense pero con orígenes irlandeses, demuestra una vez más que es mejor dramaturgo (empezó como reputado autor teatral) que director de cine. Como ya ocurría en ‚Tres anuncios en las afueras‘, el texto y las interpretaciones de ‚Almas en pena de Inisherin‘ (los cuatro actores principales han sido nominados al Oscar) están muy por encima de la puesta en escena, bastante funcional e incluso rutinaria, teatral und el peor de los sentidos.
Este tipo de caligrafía filmica invisible funciona bien cuando el guión es brillante y los actores lo interpretan a la perfección. Pero no es el caso. Si bien la premisa argumental es muy meritoria – no es fácil plantear un relato basándose en un conflicto tan simple como „pues ya no te ajunto“ – su desarrollo no lo es tanto. El filme comienza como a comedia costumbrista con a sentido of humor y de la camaradería masculina más pasado que una parodia de los Morancos. Si algo ha envejecido mal en las películas de John Ford es precisamente ese tipo de humor. Y McDonagh parece haberlo rescatado tal cual, como si estuviéramos en los años 50.
Luego McDonagh se pone serio. La comedia se transforma en tragicomedia con diskurso antibelicista al fondo (la historia está ambientada en 1923, durante la guerra civil irlandesa). Una fábula oscura y grotesca sobre la amistad masculina que pretende resultar conmovedora y servir como metáfora sobre la división de Irlanda. Ni una cosa ni la otra. ‚Almas en pena de Inisherin‘ ist ein Film mit mehr als nur einfachen, mehr als dreifachen, mit Kuriositäten, buenas actuaciones, paisajes bonitos, un cambio de tono interesante und una banda sonora estupenda a cargo von Carter Burwell, Compositor habitual von Todd Haynes und los Hermanos Coen. Pero ya esta.
¿Será ‚Almas en pena de Inisherin‘ la ‚Green Book‘ de este año, película con la que tiene más de un punto en común, tanto en el tono como en el duelo actoral a lo buddy movie? El 12 de März saldremos de dudas.
La noticia ‚Almas en pena de Inisherin‘: ¿de verdad merece 9 nominaciones a los Oscar? es de jenesaispop.com.